En un futuro cercano la próxima canción que quizá se escuche en las radios podría venir ya no de un artista sino de una máquina, esta es la teoría a la que apunta Jukebox, una red neuronal capaz de imitar a cualquier artista musical creando canciones que siguen ese estilo.
De manera que este sistema para lograrlo hace uso de la inteligencia artificial donde se ha entrenado con 1,2 millones de canciones, dando como resultado el poder generar por sí sola la letra de la canción, la música de un artista, aunque este ya haya fallecido.
Una vez está entrenado, el sistema puede comenzar a crear canciones a partir de un artista y creará de cero una muestra de sonido de una canción que conservará ese mismo estilo.
Esto es posible porque Jukebox funciona mediante un llamado codificador automático (autoencoder), que comprime el audio de entrada en un espacio dimensional más reducido en el que se descarta cierta información considerada irrelevante, donde el mismo modelo es entrenado para después dar como resultado un estilo de patrón parecido al cantante.