En el cerebro de un hombre tetrapléjico se implantó con éxito un conjunto de microchips y gracias a unos algoritmos de inteligencia artificial se conectó su cerebro con la médula espinal y el cuerpo.
Este bypass neural doble forma un puente electrónico que permite que la información fluya de nuevo entre el cuerpo y el cerebro del hombre para restaurar el movimiento. Así como las sensaciones en su mano con mejoras duraderas, que se extienden a su muñeca y a su brazo.
El logro ha sido obra de ingenieros y cirujanos de medicina bioelectrónica de los Institutos Feinstein de Investigación Médica adscritos a la red de atención médica Northwell Health en Estados Unidos.
La operación a cerebro abierto tuvo lugar el 9 de marzo pasado en el hospital NSUH (North Shore University Hospital) y duró 15 horas.
Paralizado del pecho para abajo, Keith Thomas, de 45 años, de Massapequa, Nueva York, es el primer ser humano en utilizar la tecnología.
Operación exitosa
“Esta es la primera vez que el cerebro, el cuerpo y la médula espinal se conectan electrónicamente en un humano tetrapléjico. La idea es restaurar el movimiento y la sensación de manera duradera”, enfatiza Chad Bouton, profesor del Instituto de Medicina Bioelectrónica de los Institutos Feinstein.
Cuando el sujeto de estudio piensa en mover el brazo o la mano, su médula espinal recibe una señal amplificada. Entonces su cerebro y sus músculos son estimulados.
Esto ayuda a reconstruir las conexiones que se perdieron, brindar retroalimentación sensorial y promover la recuperación.
“Este tipo de terapia impulsada por el pensamiento cambia las reglas del juego. Nuestro objetivo es usar esta tecnología para brindarles a las personas que viven con parálisis la capacidad de vivir una vida más plena e independiente”.